Por: Hugo Andrés Gómez Vásquez – Abogado
Colombia es uno de los países con el índice más alto de hacinamiento carcelario en el mundo (Holguin, 2012). En reiteradas ocasiones se ha relacionado la tardanza en los procesos como una de las causas principales de la población carcelaria de Colombia. Es una realidad que personas naturales, presuntamente culpables, están a la espera de que se aclare su situación judicial, pero en esta espera, ven violentados sus derechos no solo porque están privados de su libertad, sino porque las condiciones carcelarias son deplorables (Villar, 2013).
Dentro de las medidas preventivas del proceso penal, encontramos la medida de aseguramiento como una solución a la presencia del sindicado dentro del proceso, sin embargo, existen a nivel mundial otros mecanismos que pueden garantizar no solo la presencia del sindicado, sino además garantizar que económicamente podrá resarcirse el daño causado, en caso de una Sentencia Condenatoria.
Dentro de un proceso judicial colombiano pueden darse dos variables a saber: declarar a la persona culpable o inocente. En el caso de ser declarado culpable, la fianza aparece como una garantía para la completa satisfacción de los prejuicios y daños ocasionados con el objetivo de evitar el incidente de reparación. En caso de que la persona sea declarada inocente, la garantía establecida en la fianza, retornará en su totalidad al procesado.
Atendiendo a que el objetivo principal de la justicia, y más específicamente la Justicia Penal, busca: “1) La decisión sobre la punibilidad del imputado. 2) La protección de los Derechos del procesado. 3) La protección de los derechos de la víctima. 4) La solución del conflicto social que genera el delito.”2 Es menester resaltar el papel importante que tienen las medidas cautelares al respecto. (González, 2012)
La fianza cumpliría un papel importante dentro del proceso penal, porque lograría hacer un cambio bastante notorio, dando cabida a la presunción de inocencia que, a hoy, se está ignorando en Colombia, facilitando el cumplimiento a los lineamientos carcelarios emanados internacionalmente es el caso de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos – CIDH, con fines a el respeto por los derechos humanos en el ámbito carcelario. (Humanos, Comisión Interamericana de los Derechos, 2012).
Finalmente, la fianza es una figura necesaria dentro de nuestro ordenamiento jurídico penal colombiano, puesto que cumpliría con parámetros legales para ser una figura implementada, con características semejantes a las ya existentes pero con propósitos complementarios en el proceso, una figura que oxigenaría la justicia en Colombia colaborando con la no vulneración de derechos fundamentales, y retornando la confianza de la población colombiana en el aparato judicial, bien sea del acusado como de la víctima.